Si nuestro amigo Pedro nos cuenta que se ha comprado un piso, entre las primeras preguntas que le haremos estarán cuánto le ha costado y cuántos metros cuadrados tiene su nuevo hogar. Si nos enteramos también de dónde se lo ha comprado, de cuáles son las calidades, de cómo son las zonas comunes, etc. haremos un cálculo mental de si nos parece caro o barato a partir del coste unitario (€/m2) correspondiente a dichos factores. En ningún momento pensaremos en cuánto esfuerzo le supuso a la constructora la ejecución del proyecto.
En cambio, en la construcción de software, la unidad de medida habitual sigue siendo en esfuerzo: se paga por la cantidad de esfuerzo empleado en lugar de por lo efectivamente producido. Y aunque fabricar software no es lo mismo que construir casas, existen métricas que permiten mediar la cantidad de software producida. Una de estas métricas son los Puntos Función (PF) y constituyen el equivalente a los metros cuadrados del ejemplo anterior.
El Análisis de Puntos Función es un método fiable para medir el tamaño de la funcionalidad de los desarrollos software. A diferencia de lo que ocurre con el sistema internacional de medidas, no existe una medida del tamaño del software universalmente aceptada. De esta manera, existen distintos métodos ISO estándar para calcular el tamaño en puntos función.
A pesar de esto, la selección de una u otra no resulta tan complicado si tenemos encuenta que los puntos función IFPUG (www.ifpug.org) es la métrica más utilizada en el mundo y continúa expandiéndose.
Volviendo a nuestro ejemplo, ya sabemos calcular el equivalente a los metros cuadrados para nuestro software. ¿Cómo seguimos? De la misma forma que el precio del metro cuadrado varía en función de la situación, de las calidades, de las zonas comunes, etc., el precio del PF o coste unitario (€/PF) depende de una serie de factores.
Cuando se dispone de un sistema de medida de la producción de software, es posible gobernar el proceso de desarrollo con un criterio industrial, basado en lo efectivamente producido (€/PF). Así, una vez que se tiene el tamaño de un producto software expresado en PF, se puede utilizar este dato para distintos propósitos, entre ellos:
- Gestión de la productividad: con el tamaño en PF y el esfuerzo -o costerequerido,
pueden establecerse indicadores de productividad en términos de
jornadas -o euros- por PF. - Realización de estimaciones: con el tamaño en PF y la productividad, se puede
estimar el esfuerzo o coste de un proyecto. Existen las herramientas para que
la gestión y los costes TI estén asociados al tamaño de lo producido y no a los
recursos y horas consumidas en su producción, sólo hay que utilizarlas.
Dácil Castelo
Directora de estimaciones y productividad de LEDAmc
Artículo publicado en el economista.